7 tipos de profesores que te encontrarás en la universidad
Si estás a punto de comenzar la universidad quiere decir que ya has pasado el mal trago de la selectividad y que estás encantado de decir adiós a todos aquellos profesores que te han acompañado durante tus años de instituto.
Pero si pensabas que te ibas a librar de los típicos profesores plastas o graciosillos, estás (muy) equivocado: en la universidad también te los vas a encontrar. Este es nuestro TOP 7:
1. El coleguilla.
Sí, se supone que en la universidad profesores y alumnos son más maduros, pero siempre te vas a encontrar a aquel profesor que piensa que conecta con la juventud. Es el típico profesor accesible y molón.
2. Don manual.
Como en todas las etapas educativas nos vamos a encontrar el típico jeta que da clases con el único objetivo de que compremos su libro. Sí, todas las clases van a girar a entorno de su publicación, te va a obligar a comprarlo y si no lo lees te va a ser imposible aprobar.
3. El hueso.
Los primeros días de universidad te servirán para que tus compañeros de otros cursos te adviertan de aquellos docentes con los que te va a ser imposible aprobar: profesores adictos a las segundas convocatorias y que disfrutan siendo los huesos más duros de roer de toda la facultad.
4. El amante de las nuevas tecnologías.
Hablamos de ese sujeto que presume de saber usar a la perfección las TIC y que se limita a pasarte un insufrible PowerPoint en Comic Sans gracias a ese proyector para la educación instalado en el techo de todas las aulas. Con el tiempo descubrirás que tener un Doctorado no es sinónimo de saber utilizar un proyector.
5. El sabelotodo.
Dícese de aquel profesor que no ha hecho nada más en su vida que dar clases en la facultad pero no tiene ningún reparo en poner de vuelta y media a todos los profesionales del sector. Él que sabe más que nadie pero no le preguntes cuáles son sus logros.
6. Don fotocopias.
Se trata de aquel tipo de profesor que la da igual que la carrera te esté costando un dineral y que te obliga a comprar fotocopias prácticamente a diario. Será el culpable de que el peso de tu carpeta te de dolor de espalda.
7. El abuelito encantador.
Es aquel profesor que supera con creces la edad de jubilación pero que sigue dando clases con la misma energía desde que tenía 30 años. Es un hombre comprensible, amante de los trabajos en grupo y con el que es fácil aprobar.
