En muchas ocasiones, la inteligencia brilla por su ausencia. Y claro, la gente trata de compensarlo a través de comportamientos bastante extraños. Con el único objetivo de parecer más inteligente que los que están a su alrededor. Cuidado no hagas alguna de estas cosas de la lista, a ver luego cómo se lo explicas a tus amigos.
1. Escribir frases filosóficas en las redes sociales. En sí, la acción no está mal, lo que está feo es coger una frase de Gandhi y decir que se te acaba de ocurrir cuando lo más reflexivo que ha salido de tus labios ha sido un “arbitro hijo de puta”. También somos muy fans de los que se curran una frase pero se coronan con patada al diccionario.
2. Ir con el Ebook en el autobús. Es muy friki y no hay discusión posible. Leer un libro es sexy, leer un Ebook no. Crees que es trendy, actual y disfrutas con tus archivos descargados de la biblioteca más grande del mundo, Internet. Pero no te engañes.
3. Usar expresiones en latín. El Alea jacta est de antes de un examen está más pasado que Naranjito 82. Y bueno el Carpe Diem también está bastante machacado…
4. Escuchar música indie. Vosotros sois los más modernos. Que si Vetusta Morla, que si Love of Lesbian… No os engañéis, en el fondo no os gustan, bueno o sí si sois un poco raritos, lo que os gusta es decir “¿en serio que no conoces a Pelícanos Marginales? Son buenísimos.”
5. Ver películas y series en versión original. Esto acostumbras a hacerlo en soledad porque, en el fondo, no tienes ni idea y los sabes y por eso te toca volver a poner la escena cada 5 minutos. No te engañes, siempre acabas poniendo subtítulos o dejando la película a medias.
6. Llevar gafas. Si eres de los que las lleva sin cristales es para darte, menos si eres Berto, a él se lo perdonamos. Lo de los gafapasta ha sido como una plaga de conejos, han surgido de repente, sin que nadie se lo oliera. Pero los peores de todos son los que se suben las gafas con el dedo índice en medio de la conversación para reforzar su argumento.
7. Llevar bufanda/foulard. En diciembre está bien porque refresca y hay que cuidarse, pero en pleno julio con 30 grados sobra. Si no eres francés ni director de cine mejor que no te lo pongas.
8. Hacerte el experto en Gin Tonics. Postureo del bueno, sobre todo si bebes esa ginebra tan buena que no se debería utilizar ni para desinfectar la barra del bar. Poner pepino, pétalos de rosa, enebro y mandarina en un vaso, no es una copa, es una ensalada.
Consejo: Rodearse de gente aún menos inteligente que tú. Nadie va a saber más sobre Nietzsche ni te van a discutir algo de su obra si estás en una guardería. I win.