1. "¿Me haces un dibujo?".
Estamos hartos de oír que todos queréis un dibujo nuestro, os tomáis muy a la ligera el "amor al arte".
2. Te encanta mancharte.
Aunque sea con lápiz nos encanta mancharnos y acabar pintando con los dedos.
3. Siempre vas a tener mínimo un hater.
Va con el pack del buen artista, todo aquel que haga bien algo, medianamente, va a tener mínimo una persona que siempre diga que lo que está haciendo está mal, o es feo. ¡Son nuestros mejores seguidores y fans!
4. Nunca tienes suficientes utensilios.
Nos encanta comprar nuevos lápices para probar, tipos de tela de lienzo y todas las técnicas posibles ¡nunca hay suficientes!
5. Pintamos en todas partes.
Sí, toda aquella superficie: mesa, libreta, pared, ropa, libros. (Siempre que no sea ilegal) acaba lleno de borratajos, bocetos o símbolos.
6. La gente cree que lo que hacemos es gratis.
Nos pasamos horas dibujando, creando y donando riñones para poder pagar los materiales y resulta que "¡vaya, qué caro es tu dibujo!"
7. Tu madre siempre te va a sacar defectos.
Siempre serán las mejores jueces, no dejan que termines un dibujo hasta que no le den el visto bueno.
8. Vendemos nuestros órganos para poder pagar los materiales.
El arte es caro amigos, muy caro, ¡y ya no te digo enviar tus dibujos por correo!
9. Nos encanta enseñar nuestro trabajo cuando nos sentimos orgullosos.
Lo intentamos millones de veces y cuando por fin sale ¡hay que mostrárselo a todo el mundo, hagamos una fiesta!
10. ¡Nos encanta nuestro trabajo!
Porque nos encanta, nos lo pasamos bien, se pasa el tiempo volando y, ¡nos encanta dibujar!
[Colaboración: Celia Gallego]