Eres un desastre ¿verdad? Y cuando ordenas es casi peor. ¿Alguna vez has llegado a reflexionar sobre tu relación con los objetos que te rodean? ¿Eres ordenado?, ¿no lo eres? ¡Qué más da! Te dejamos con las 10 situaciones que se dan cuando ordenas la habitación. Si es que lo haces alguna vez.
1.Tirarte una mañana ordenando tus cosas y luego no saber donde lo has colocado porque estabas acostumbrado al desorden.
2. Ordenar durante varias horas y, a lo largo de la semana (o al día siguiente), en un momento de rabia, desordenarlo todo y más.
3. Emocionarte en exceso cuando te deshaces de cosas, para luego rebuscarlas en la basura y recuperarlas.
4. Darte cuenta de cuán Diógenes eres.
5. Justamente llegan visitas a tu casa cuando todo está más desordenado de lo habitual. Encima llegan a tu casa, lo tocan todo y te carcome por dentro. O peor, usan tu sitio favorito y tus cosas favoritas y te entran ganas de matar. La relación los demás y tus objetos es complicada.
6.Tener cosas "por si acaso" y cuando te deshaces de ellas porque no las usas, las necesitas.
10. La usabilidad, estética y utilidad práctica es lo más relativo cuando aprecias y acaparas objetos. Ser ordenado con las cosas importará o no, la cuestión es que dan un sentido a nuestra vida, pueden dar referencia a algo o ser una expresión de identidad.