Hay días en los que no tienes ganas de nada. No encuentras trabajo, o lo tienes pero no te motiva lo suficiente, o tienes el trabajo de tus sueños pero sientes que no lo estás dando todo. Puede pasar. Hay veces en los que te sientes sin ánimos (da igual la razón), y te dan ganas de tirar la toalla. Pues bien, no te rindas nunca, este mal momento pasará y volverás con más fuerza que nunca. Y para que se haga más llevadero, aquí os dejamos 6 consejos para comerte el mundo y no venirte abajo.
1. Seguridad en ti mismo.
Tener confianza en uno mismo es muy importante. Tú sabes que puedes conseguir todo lo que te propongas y que solo tú puedes demostrarlo. Tanto si tienes trabajo como si no, la confianza que tienes en ti es muy importante. Si ni tú mismo crees en ti, ¿quién lo va a hacer?
2. No hagas caso a las críticas destructivas, pero sí a las constructivas.
Existen personas muy dañinas que buscan aumentar su ego y autoestima bajando la de los demás. Esas personas probablemente buscarán hacerte daño por algo en concreto, ya sea envidia, ocupar tu lugar, etc. Si recibes críticas destructivas es que vas por buen camino. Sin embargo, también hay personas que te quieren y buscan lo mejor para ti, por lo que será normal (y beneficioso) que te digan cosas que, en su opinión, deberías mejorar para conseguir tus objetivos.
3. No te compares con nadie.
Nadie es mejor que nadie. Como en muchos sitios habrás leído u oído, cada persona es única y especial. Cada uno de nosotros tenemos nuestros defectos y virtudes, y como no somos iguales tampoco nos podemos comparar. Lo que sí puedes hacer es compararte contigo mismo, puesto que te ayudará a exigirte más y a seguir trabajando.
4. Trabaja y esfuérzate como nadie.
Utiliza tu creatividad e imaginación. En este mundo de hoy en día tan competitivo, es necesario que existan personas creativas que aporten cosas nuevas y aire fresco a esta atmósfera tan contaminada. Si a eso le añades trabajo y esfuerzo, mejor que mejor.
5. Sé constante.
No te rindas nunca. Por muy mal que se pongan las cosas no te tienes que rendir nunca. Después de los momentos malos vienen los buenos, y cada fracaso es una nueva puerta hacia el éxito. Como diría Henry Ford : “El fracaso es una gran oportunidad para empezar otra vez con más inteligencia”.
6. Persigue tus sueños.
En esta vida es muy importante tener ilusión, tener objetivos y sueños que alcanzar, además de poseer la motivación necesaria para luchar por ellos. No hay nada más bonito que tener ilusiones y luchar por lo que quieres. No dejes de luchar y haz que tus sueños se cumplan. Yo aún sigo luchando por los míos.
[Colaboración: Desirée Nevado]