Estudiar en Navidad es imposible. No sé por qué se empeñan.
1. Antes de empezar las Navidades te harás el propósito de estudiar desde el primer día.
2. Pero ese primer día, te dirás que es mejor dejar pasar un par de días para empezar a estudiar, porque hay que descansar.
3. Y eso derivará a esperar hasta después del día 25... te mereces un descanso, ¿no?
4. A partir del día 26, rodeado de mazapanes y turrones, intentarás empezar a estudiar.
Para eso, lógicamente, creerás totalmente necesario hacer un calendario donde pongas que tienes que estudiar cada día. "Si son 750 páginas, y quedan 10 días... 75 páginas por día".
5. El día 27 te levantarás con mucha motivación, dispuesto a estudiar tus 75 páginas diarias.
Pero te darás cuenta que el escritorio está hecho un desastre, y tu habitación también. Y, de repente, lo que te ha dado igual 364 días adquiere una importancia vital, y te pasas el día 28 ordenando la habitación y los apuntes. Por colores.