Uno de los temas que mantiene polarizada la discusión del auge y penetración de las criptomonedas en nuestro día a día es el impacto medioambiental de las mismas. Los detractores de estas criptomonedas critican el consumo de energía creciente para el minado de las mismas mientras que sus defensores están tratando de buscar la forma de reducir este impacto medioambiental - y de paso, luchar contra estas críticas, ya que actualmente Bitcoin consume más electricidad en una año que Noruega o Suecia, según cifras del Índice de Consumo Eléctrico de Bitcoin en Cambridge.
La nueva campaña de Greenpeace USA, respaldada por el multimillonario fundador de la criptomoneda Ripple, Chris Larsen, afirma que el consumo de energía de Bitcoin podría reducirse en gran medida con un único cambio en la programación de la criptomoneda. Esta campaña, llamada Change the Code Not the Climate, defiende que cambiar el método de minería de Bitcoin de prueba de trabajo (PoW), en el que los disitntos equipos de minería compiten en una especie de carrera para resolver estos puzzles criptográficos y que consumen mucha energía, por el modelo de prueba de participación (PoS), hasta la fecha más eficiente engergéticamente y que reduciría el uso de la electricidad de la criptomoneda.
Gracias a este cambio, en lugar de requerir cantidades crecientes de potencia de cálculo para validar las transacciones en la cadena de bloques, el PoS requiere que los mineros apuesten su propia criptografía a cambio de poder validar las transacciones y ganar más tokens como recomensa de su trabajo.
La clave de la campaña Change the Code Not the Climate se basa en que muchas de las criptodivisas más recientes son ya poco consumidoras de energía o incluso neutras en cuanto a emisiones de carbono porque utiliza el modelo proof-of-stake. De acuerdo con la organización, si tan solo 30 personas, refiriéndose a los mineros clave, los intercambios y los desarrolladores del núcleo que contribuyen al código de Bitcoin - aceptaran reinventar la minería de prueba de trabajo, Bitcoin dejaría de contaminar el planeta.
La campaña busca también lanzar una serie de anuncios para presionar a conocidos impulsores de las criptomonedas, como el consejero delegado de Tesla, Elon Musk o el fundador de Twitter y Square (ahora Block), Jack Dorsey, ya que según ellos tienen la responsabilidad de ayudar a limpiar el impacto medioambiental del Bitcoin. De hecho, se espera que Vitalik Buterin, fundador de la red Ethereum - la segunda red de criptomonedas más grande del mundo por capitalización de mercado - pase a prueba de participación (PoS) a finales de este año.